sábado, 28 de enero de 2012

Paris, Mon amour


Buenas noches a todos. Hoy os traigo una receta de las que a mi más me gustan. Tenemos entre nuestras filas a la tarta tatin. Una especialidad francesa de las más conocidas en todo el mundo.

La historia de la tarta tatin tiene muchos protagonistas, en cada versión uno diferente, pero la unión en común con todas las historias es el porque de su forma de prepararse: una equivocación en el proceso de montaje antes de cocerla fue el resultado de uno de los postres más solicitados del mundo.


Unos dicen que fue el ayudante de un pastelero que trabajaba en un hotel el que, por un descuido de principiante, montó al revés la tarta.


Otra versión, la más conocida y aceptada , fue que el despiste lo tuvo una de las dos hermanas reposteras Tatin que , al pasarse con la cocción de las manzanas, las cubrió con hojaldre para taparlas e intentar arreglar su despiste. Cuando le dieron la vuelta surgió esta deliciosa tarta.

La elaboración debe hacerse en un molde especial para esta. Se trata de una especie de cocotte o sartén en la cual se puede hacer el caramelo directamente en la fuente de calor para luego meterla al horno y que termine de hacerse todo el conjunto.


Yo no tengo ese molde. He usado uno individual de arandela colocando un papel de horno debajo para evitar manchar la bandeja con el líquida que suelta. Sé que no es la manera más "pro" de hacerlo pero me gusta investigar y la verdad es que no ha salido nada mal.



Ingredientes ( para una tarta pequeña):

Hojaldre refrigerado (¿para que complicarnos la vida?)

76 grs de azúcar

38 de mantequilla

Un plátano
o
Una manzana

Canela (para la de manzana)

Crema Fresca

Azúcar avainillado





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Comencemos!!!!

Antes de nada lo que vamos a hacer el calentar el horno a unos 170 º hasta que lo usemos.
Lo siguiente será hacer el caramelo. Usé esas cantidades para un molde como el que veis en la foto. La característica de este caramelo es que no queda con la consistencia líquida a la que
estamos a costumbrados. La manteca al derretirse va a conseguir que el azúcar se caramelice pero no se disuelva con ella si no que nos quede como una especie de masa marrón. Yo usé un cazo de acero inoxidable. La canela que usé en la tarta de manzana se la añadí junto con el azúcar.


Cuando el azúcar se hubo derretido con un cuchara y mucho cuidado fui sacando la masa de azúcar y colocándola en el fondo del molde desmontable. Añadir en algún momento algo de la mantequilla derretida para que al calentarse en el horno no se nos queme demasiado.




Nota: Acordaros de que si lo hacéis con un molde como el mio tenéis que poner un papel parafinado o de horno dejado. Si lo hacéis con el molde original solo procurar que el caramelo no se queme.

Una vez tengamos la masa de caramelo colocamos la fruta encima. Yo hice dos tartas, una de plátano y otra de manzana. Los cortes son diferentes ya que la manzana la corté en gajos quitandole el corazón y el plátano se quedo en rodajas.


Una vez que lo tengamos colocado, metemos el molde en el horno ya precalentado a 170º durante 15 minutos. Con esto conseguiremos que la fruta se hornee lentamente y quede blandita.



Mientras esperamos a que nuestra base este preparada cortamos los discos de hojaldre. Para ello con la ayuda de la base del molde y un cuchillo yo corté discos ligeramente más grandes que el plato para que al colocarlo dentro quedaran unos bordes de masa que serán crujientes y dorados.



Cuando hayan pasado los 15 minutos de horneado procedemos a colocar el disco de hojaldre en el interior, sobre la fruta.Con mucho cuidado de no quemarnos!!!! Y de nuevo al horno. Esta vez subimos ligeramente la temperatura, hasta uno 180º otros 15 minutos o hasta que el hojaldre se dore.

Cuando hayan pasado los 15 minutos o el hojaldre este dorado es el momento de sacarlo del horno y desmoldarlo. A ser posible tiene que ser en caliente para que nos sea más fácil. Con mucho cuidado de no quemarnos y ayudándonos con un trato de cocina o unas manoplas abrimos la arandela del molde y damos la vuelta a la base para que nos quede el hojaldre sobre el plato o la fuente donde vayamos a presentar. Y ahora con la ayuda de un cuchillo de punta fina vamos introduciéndole poco a poco por debajo de la base metálica para ayudar a que la fruta se despegue. Montamos la crema fresca con el azúcar avainillado ( la cantidad es a gusto de cada uno) E ..... voila!!!!!!!!







Están para morirse de ricas !!!!!
Solo espero que la hagáis y os guste tanto como a mi .



Desde la calle de la gominola...con amor ^^



viernes, 20 de enero de 2012

Son blanditos....

Buenas noches mis queridos devoradores de Sirope de Fresa. ¡¡¡¡Tengo grandes noticias!!!!

Haciendo realidad uno de mis sueños desde que era una enana, en el mes de Marzo pongo en funcionamiento Sirope de Fresa de forma física. Coincidiendo con mi mudanza a la ciudad de Málaga en busca de una nueva vida, empiezo también una nueva carrera profesional. Y poder trabajar desde mi casa, en mi cocina, con mis normas, con mi ritmo y pasándomelo genial mientras lo hago. Además, esto me permitirá disfrutar más de mi vida personal y social sin tener el agobio de los interminables turnos de cocina en un restaurante.............. ¡¡¡¡2012 va a ser un gran año!!!!! Pero os mantendré informados.

De momento voy a dejaros con la receta de hoy.Como tenía el día un poco vago (yo a veces también soy un poco remolona jejej) me he decidido por algo sencillo de hacer pero con un aspecto increíble y un sabor aún mejor.Hoy tenemos....tachan..... Muffins!!! Unos de chocolate con nueces caramelizadas y otros de fresa.

Por cierto, hoy tampoco tenía el día inspirado y me han salido unas fotografías pésimas...lo siento.

Ingredientes (Para unos 6 o 12 muffins dependiendo del tamaño):

195 grs de harina

75 grs de azúcar

5 grs de sal

150 ml de leche normal o desnatada

75 ml de aceite suave de girasol o de semillas

Fresas naturales

3 cucharadas de cacao en polvo

Nueces de macadamia

Azúcar para caramelizar

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Comencemos!!!!!

Lo primero es hacernos con dos bols. En uno de ellos, el que más rabia nos dé mezclamos la harina con el azúcar, la sal y la levadura en polvo. Una vez hecho esto tenemos que hacer un hueco en el centro de esta harina para añadir, ya todo mezclado en una recipiente aparte, el huevo con la leche y el aceite. Recordar lo de siempre: Ingrediente secos por un lado y los líquidos o que tenga humedad por el otro. La mantequilla va por libre ^^



Remover bien con unas varillas sin mezclar demasiado.Lo suficiente como para conseguir una masa consistente. Es en este momento cuando la dividimos en dos partes.

En una de esas masas añadimos las cucharadas de cacao. Es posible que necesitéis añadir un poco más de leche para conseguir una textura fluida. La reservamos y en el otro bol vamos a mezclar las fresas cortadas en trocitos. Para la mitad de la masa usé dos fresones de los más maduros que tenía.





Ahora llega el momento que más me gusta de todos: preparar las nueces caramelizadas.
Para ello, lo primero que tenemos que hacer es engrasar con algo de aceite la superficie donde vayamos a dejar que se enfríen. Yo lo hice sobre el mármol de la encimera pero si lo preferís podéis hacerlo sobre una tabla de corte. Lo importante es que lo dejemos bien cubierto de una fina capa de grasa para evitar que el caramelo se pegue a la superficie y nos cueste mil y una ayuda despegarlo.

En un cazo ponemos unas cuatro cucharadas de azúcar y lo dejamos al fuego. No es necesario añadir agua. Cuando tengamos un caramelo doradito añadimos las nueces enteras y con la ayuda de una cuchara también engrasada de aceite vamos removiéndolas para que se cubran bien por todas partes.
Una vez hecho esto , las pasamos a la superficie engrasada y las dejamos enfriar. Una vez frías con una mazo de madera (sirven los de espalmar la carne) golpeamos para romperlas. Cuidado porque saltan y son como proyectiles azucarados.

Cuando las tengamos rotas las añadimos a la masa de chocolate y mezclamos.


Ahora solo queda poner las masa en los moldes e introducirlos en el horno precalentado media hora antes a 180º C durante otra media hora o hasta que al pincharlos con un cuchillo salga limpio del centro.


Los moldes podéis usar los de magdalenas de toda la vida pero, como los muffins me gustan grandes he usado también molde de metal para hacer flanes individuales que les dan un aspecto más estilizado y contundente.

Y aquí tenéis el resultado ^^



Ahora solo queda lo que todos sabéis..¡¡¡¡a cocinar se ha dicho!!!!!


Desde la calle de la gominola...con amor ^^

domingo, 15 de enero de 2012

Un gran regalo


Por desgracia de las desgracias, hoy tenía pensado enseñaros como quedan los sonajeros pero me he dado cuenta que.....¡¡me he quedado sin hojaldre!!! Mañana mismo saldré a comprarlo y os prometo que esta semana tenéis receta doble.

Mientras, os dejo con esta foto:



Las bombas de patata hechas por una amiga del facebook y seguidora del blog Argi Berrojaldiz

Es la primera receta de este blog que veo hecha por uno de vosotros y ainssss...que ilusión me ha echo. Muchisismas gracias guapa ^^

sábado, 14 de enero de 2012

Unos bonitos sonajeros



Despues de una semana infernal (porque todos los que trabajamos tenemos alguna que otra así.....¿no?) y en lugar de actualizar el Viernes como tenía pensado , llego con una nueva receta para vosotros.

Aunque esta vez no la definiría como tal. Es más bien....como decirlo...un juguete que podemos masticar!!!!.

Llevo recordando este detalle de la cocina desde que lo vi por primera vez en la televisión a uno de los grandes aquí en España, Joan Mari Arzak.

Os tengo que confesar una cosa: no me gusta la nueva cocina.Ni la de diseño, ni la de autor ni la minimalista o como queráis llamarla, no.Ninguna!!!!!!!! estoy chapada a la antigua lo siento. Para mi, como buena asturiana, una fabada es una fabada. No una espuma de esto y una gelatina de lo otro con un crujiente de vaya usted a saber que.


Supongo que como todo, tiene que evolucionar pero....¿siempre son los cambios para mejor? Hay dejo la pregunta.

Pero sin embargo, este pequeño detallito que este hombre tuvo para con su nieto Mateo, es gracioso, sencillo y os puede dejar muy bien ya no como entrante porque apenas tiene consistencia, pero si como bienvenida nada más entrar por la puerta que sirva de antesala para lo que está por llegar a la mesa.

El sonajero no es más que frutos secos fritos previamente en un aceite de oliva o girasol para después congelarlos junto con ese aceite en moldes de cubito de hielo o moldes de silicona aptos para ello.



Yo lo que usé fueron mitades de nueces de macadámia ligeramente tostadas al horno para evitar que absorbieran demasiado aceite y luego las cubrí con virgen extra en unos moldes de cubitos de hielo. Estarán toda la noche en el congelador hasta mañana a la tarde.

Cuando ya estén bien congeladas, se desmolda todo y se cubre rápidamente con pasta filo o pasta de hojaldre que hayamos dejado muy finita.

Pregunta: Al manipular los cubitos de aceite se me deshacen en las manos....¿Qué puedo hacer para evitarlo?

Respuesta: Pues aunque suene arcaico lo mejor para estos casos es enfriarnos las manos. Ni más ni menos. Un rato debajo del agua fría bajará la temperatura superficial de nuestra piel y nos permitirá mover, tocar y cubrir los cubitos con mayor facilidad.

Una vez que los tengamos completamente cubiertos a modo de cuadrado, fijando los bordes entre si con yema de huevo ( como hacemos para las empanadillas) los volvemos a tener en el congelador hasta que los usemos.
Llegado el momento, se fríen en el mismo tipo de aceite que usamos para congelar, y no tengáis miedo que no van a saltar porque no lleva nada de agua.

El resultado que vamos a tener son unos cuadraditos crujientes de hojaldre o pasta filo y al agitarlos sonará el trocito de nuez ( o lo que hayáis usado) en el interior recordando a un sonajero.

¿Sencillo verdad? Algo original y sin complicaciones que sorprenderá a los invitados.

Mañana os enseñaré en otra entrada el resultado

Y además hoy os dejo este link que añadiré a mi lista de páginas a las cuales soy adicta ;)

http://www.justapinch.com/ Es un sitio americano con una cantidad de recetas de repostería, ensaladas,desayunos... todas de las seguidoras de la web.
La pega...que está todo en ingles pero con un poco de paciencia y un buen traductor todo se consigue. Espero que os guste. Como siempre....

Desde la calle de la gominola...con amor ^^

sábado, 7 de enero de 2012

¡¡¡Tengo una bomba y sé como usarla!!!!



En realidad tengo cuatro!!!!! Y son tiernas y crujientes.

Una receta sencillísima de hacer y que os puede servir como acompañamientos de unas carnes o como entrante en una cena con los amigos. Y los ingredientes:económicos y que todo el mundo debería de tener en su casa.






Ingredientes (para 4 personas):

1 patata grandes o en su defecto dos de tamaño mediano

2 calabacines pequeños

1 cucharada de miel

1 huevo

Pan rallado

Sal y pimienta

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Comencemos:


Lo primero es pelar la patata y cortarla en trozos más o menos del mismo tamaño para que nos tarden lo mismo en estar lista. Es mejor usar patatas especiales para cocer porque así nos aseguramos que estarán tiernas y tardarán poco en quedarse tiernas. Aunque no pasa nada si usamos unas patatas normales. Calculamos que estarán en unos 20 minutos /media hora.



Mientras esperamos vamos a preparar el calabacín. Para ello , yo usé dos de agricultúra ecológica. Por una sencilla razón: además de ser más pequeñitos, a mi me gusta cocinar el calabacín con su piel y la de este tipo de vegetales que provienen del campo sin ningún tipo de tratamiento pesticida ni fertilizante es más suave al tacto y queda realmente tierna.



Aunque sé que hoy en día se suelen encontrar ya con más facilidad, podéis usar unos de los "normales" que no va a pasar absolutamente nada. Como dije antes yo los cocino siempre con piel pero si preferís quitársela, adelante!!!

También podéis añadirle más ingredientes al relleno como cebolla, tomate, puerro, berenjena o incluso algo de carne picada o unas migas de bonito.

Lo cortamos en trozos pequeños y lo rehogamos en una sartén con un poco de aceite , a fuego medio, hasta que veamos que empieza a tomar un tono tostado. Importante que se dore porque eso le dará junto a la miel el sabor característico de esta receta.



Una vez que lo tengamos dorado añadimos la cucharada rasa de miel.

Pregunta: ¿Qué tipo de miel?

Respuesta: Realmente cualquiera es buena aunque personalmente he usado una miel de flores porque me resulta más suave que la normalmente se usa. Aunque, también podéis usar una de eucalipto que le dará al conjunto un toque de frescor que le quedará genial. Si no conseguís haceros con una, os aconsejaría que le pusierais un poco de jengibre , solo una ralladura.

Es importante que la miel se la añadamos en caliente para que se disuelva y empape todo el calabacín. Una vez hecho esto, le añadimos una pizca de sal y reservamos.

Para entonces las patatas deberían estar cocidas. Las pinchamos con un cuchillo y si están tiernas las sacamos a un plato bien escurridas de agua.

Las machacamos con un tenedor hasta conseguir un puré espeso. Si quedan trocitos no pasa absolutamente nada. Añadimos sal y pimienta al gusto.




Y ahora es cuando empiezan las manualidades: tomamos un poco de puré en nuestras manos y le damos forma de pelota, como si estuviéramos modelando una albóndiga. Hacemos un hueco en el centro de esa bola y ponemos un poco del relleno de calabacín.
Si el puré esta un poco caliente mejor, nos será más fácil manipularlo.Pero ojo!!!! sin quemarnos que no es necesario





Con un poco más de puré tapamos el relleno y moldeamos un poco más , apretando la bola entre nuestra manos ahuecadas para hacer que el puré quede bien unido. Y nos debería de quedar algo como....esto!!!!




Ahora solo queda rebozarlas en el huevo y el pan rallado y freírlas en una sartén con abundante aceite caliente, cuidando de que no se nos quemen y dándoles vueltas con la ayuda de dos tenedores.





Podéis acompañarlas con una salsa picante o una salsa de tomate casera con algo de cilántro molido. Estas riquísimas!!!!

Espero que os haya gustado y ya sabéis, a ponerlas en práctica

Desde la calle de la gominola....con amor ^^

jueves, 5 de enero de 2012

Un día muy especial


¡¡¡¡¡Bienvenidos a mi mundo!!!!!

No he podido elegir un día más señalado como es el de la noche de reyes para comenzar este pequeño proyecto.El momento de los regalos se acerca y nada mejor para inaugurar todo esto que un roscón.


Voy a confesar que la receta no es mía si no de un blog de cocina maravilloso que se llama La Receta de la Felicidad ,lo que no significa que no me vaya a quitar mérito de haberlo conseguido porque, para un amante de la cocina y de la repostería, las masas es una de las asignaturas más complicadas
que puede haber. Además, le he dado mi toque personal como siempre ^^

Allá vamos!!!!!




Este roscón consta de dos masas diferentes aunque muy parecidas en su base. Lo que es el mezclado de ingredientes es sencillo y rápido. Lo que os llevará más tiempo es el reposo de masa pero, como siempre digo, en la cocina es necesario dos cosas: cariño y mucha paciencia. Así que aplicaros el cuento ^^

Ingredientes:

**PARA LA MASA MADRE**


-70 grs de leche
10 grs de levadura fresca (podéis encontrarla en las panaderías, en el Mercadona o en el Erosky)
1 cucharadita de azúcar
130 grs de harina de fuerza


** PARA LA MASA PRINCIPAL**

60 grs de leche
70 grs de mantequilla
450 grs de harina de fuerza
2 huevos
un pellizco de sal
15 grs de levadura fresca
120 grs de azúcar normal o glass aromatizada con cítricos (luego os explico como hacerlo)

**PARA LA TRUFA**
400 grs de créme fraîche
200 grs de chocolate del 70%
75 grs de azúcar glass

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Comencemos:

Lo primero que debéis saber es que, todos los ingredientes que usemos y que debemos tener guardados en la nevera, es aconsejable dejarlos a temperatura ambiente

al menos media hora antes de ponernos a hacer la receta.

Pregunta: ¿Y por qué?

Respuesta: Muy sencillo, a temperatura ambiente todo lo que por norma general necesita estar en frío adquiere el volumen y el peso que realmente tiene. Es decir, un huevo recién sacado de la nevera pesara menos que uno que lleve diez minutos fuera porque todos sus componentes no se habrán "relajado" y habrán perdido esa baja temperatura del frigo.

Una vez hecho esto comenzamos con la preparación de la masa madre. Para ello algo tan fácil como poner en un bol la harina con la levadura desmenuzada como si fueran miguitas de pan.





Mezclamos bien con una espátula o con la manos, que deberemos tener hiper-super-limpias; como más cómodo nos resulte. Una vez hecho esto pasamos a añadir la leche con el azúcar. Amasamos bien hasta conseguir una masa consistente y cuando podamos manipularla bien la pasamos a la encimera y seguimos amasando allí. No es necesario que nos quede lisa y uniforme. Con que tenga algo de cuerpo es suficiente.






En el mismo bol donde hicimos la mezcla, añadimos agua templada hasta casi llenarlo e introducimos dentro la masa madre. ¡¡¡Sin miedo!!! Sé que resulta extraño pero comprobareis que después de unos 15 minutos comenzará a flotar en la superficie. En ese momento es cuando ya la tenemos lista para sacar del agua y dejarla en un platito.





Ahora seguimos con la masa principal.



En repostería hay una máxima muy importante y es la siguiente: Los ingredientes secos primero y los húmedos y líquidos por último. Con esto quiero decir que, en este caso, mezclaremos en un bol la harina tamizada, con la sal y el azúcar aromatizado ( basta con rallar la piel de unas mandarinas y un limón en el azúcar y mezclar). Una vez hecho esto, hacemos un hueco en el centro y añadimos la leche templada donde habremos disuelto la levadura, los huevos y la mantequilla derretida junto con la masa madre.




Y empezamos a mezclar!!!

Primero mejor nos ayudaremos de una espátula o una cuchara. Cuando veamos que empieza a tener cuerpo y podemos manipularla con las manos la pasamos a la encimera que habremos engrasado con un poquito de aceite. Seguimos amasando con las manos por espacio de unos quince minutos, hasta conseguir una bola lisa y suave.
Y aquí es cuando tenemos que armarnos de paciencia porque tendremos que dejarla reposar en un cuenco, cubierta con un papel film ligeramente engrasado con aceite por espacio de una hora o hasta que veamos que ha doblado su volumen.




Yo aproveché este tiempo para hacer la trufa. Ponemos en un cazo la cremé fraîche con el azúcar glass y calentamos hasta que empiece a aligerarse.Añadimos el chocolate en trocitos y removemos constantemente hasta que se deshaga. Pasamos a un bol y reservamos en la nevera.

Personalmente uso la cremé fraîche porque le da al la trufa un sabor ligeramente amargo, que junto con el chocolate de 70 % deja un regusto a esas vallas de cacao sin refinar que todo amante del chocolate sabe apreciar ^^




Pasado el tiempo de reposo debemos de comprobar que la masa a subido su volumen. Estaremos seguros de ello si vemos que ha llegado a tocar el papel film. Hecho esto la sacamos del bol y la dividimos en dos bolas. Esta cantidad de masa da para dos roscones nada pequeños, que además, rellenaremos con la trufa con lo cual si tenéis la tentación de hacer uno solo... allá vosotros con las consecuencias jajajaja.


De acuerdo, una vez tenemos las dos masas, tomamos una y vamos formando bolas del tamaño de nuestra palma que colocaremos dentro de un molde de chimenea, como los que se usan para los bizcochos,separadas entre sí más o menos un dedo.





Y otra vez deberemos dejarlo reposar por espacio de una hora y media - dos horas.

Pasado este tiempo pintamos con leche con la ayuda de una brocha , con mucho cuidado de no romper la masa porque perdería el aire y se nos bajaría. Colocamos por encima almendra picada (opcional, a gusto de cada uno).


Metemos en el horno que tendremos precalentado a 170º durante 30 minutos . Si veis que se nos tuesta demasiado podéis taparlo con papel de horno o papel de plata.
  • Nota: El tiempo y la temperatura los he modificado conscientemente. Con mi horno me viene mejor hornear la masa desde el principio a baja temperatura ya que queda más esponjoso y se le quita mucho la sensación de "galleta".Lo he comprobado esta misma tarde con un roscón de encargo para unos amigos. El de estas fotos lo cociné a una temperatura más elevada y aunque quedó bien, no salio tan esponjoso como el de hoy por la tarde.


Mientras se hornea, sacamos de la nevera la trufa y la montamos como si fuera nata y volvemos a guardar.

Para entonces ya tendremos el roscón fuera del horno y frío. Es el momento crucial: ¡¡¡¡desmoldarlo!!!!!
Sin miedo, ponéis un plato sobre el molde y le dais la vuelta con decisión.Agitamos un poco por si se ha quedado un poco pegado y listo.



Ahora solo queda abrirlo por la mitad con ayuda de un cuchillo bien afilado o de un corta-bizcocho y rellenar con la trufa.

La decoración es algo muy personal, por eso no voy a meterme en ese terreno. Yo lo he cubierto de trufa porque sé que a la persona a la cual va destinado le encanta el chocolate (por algo es mi marido :) )


Pues esto ha sido todo por hoy. Para ser la primera receta ha sido contundente. La próxima vez prometo no enrollarme tanto. Espero que lo disfrutéis y si lo hacéis dejarme un comentario para contarme como os fue.


Desde la calle de la gominola...con amor ^^